La Comunidad de Madrid, Cataluña, Andalucía y Comunidad Valenciana son las cuatro regiones que concentran el mayor volumen de este tipo de casas
Más espacio, un mayor contacto con la naturaleza para desconectar de la tensión del día a día, la proximidad a la playa, la vuelta a los orígenes familiares en los periodos de descanso o simplemente como oportunidad de inversión son algunos de los motivos que llevan a los españoles a tener un refugio en otra zona del país.
Además, tradicionalmente España es también un destino muy atractivo para los extranjeros, unos de los principales compradores en las zonas costeras. En plena vorágine Covid, la demanda de este tipo de viviendas vivió un significativo repunte. Un periodo de brillo que parece haber tocado a su fin en un contexto complejo, jalonado de todo tipo de nubarrones. «El mercado de la segunda residencia es muy activo en España. Sin embargo, este último año hemos podido ver un ligero retroceso respecto a los años de la pandemia, cuando este tipo de viviendas repuntó. Aun así, podemos afirmar que en la actualidad representa en torno al 10% de la demanda de viviendas en nuestro país», ratifica Ferran Font, director de Estudios de pisos.com.
Tal y como ocurre en prácticamente todos los aspectos del sector inmobiliario, el mercado de las segundas residencias depende mucho del contexto económico, político y legislativo. «Al acabar la pandemia, con la pérdida de poder adquisitivo de una importante parte de la población y la tendencia alcista de los precios, que desplazan a una parte de los interesados al mercado del alquiler, el número de demandantes de segunda residencia se ha visto reducido», añade Font.
Tal y como ocurre en prácticamente todos los aspectos del sector inmobiliario, el mercado de las segundas residencias depende mucho del contexto económico, político y legislativo. «Al acabar la pandemia, con la pérdida de poder adquisitivo de una importante parte de la población y la tendencia alcista de los precios, que desplazan a una parte de los interesados al mercado del alquiler, el número de demandantes de segunda residencia se ha visto reducido», añade Font.